Javier Alzo publica su nuevo trabajo: “Los jóvenes y la Felicidad. ¿Dónde la buscan? ¿Dónde la encuentran?” El principal investigador para España del ‘European Values Study’ sostiene que la felicidad nace de la virtud y de la justicia, de la caridad y del amor universal. La sociedad de la sobreabundancia da hijos prepotentes, precisamente los más violentos, los más tiranos y, sin duda, los más infelices.
«Es falso que sólo la diversión dé la felicidad».
— ¿Cómo ha ocurrido esto? La familia ha dimitido de su misión educadora. También la propia escuela, dando como mal vistos los términos de disciplina, de orden y de obediencia. Y la sociedad en su conjunto: todo lo que fuera prohibir y poner límites era algo negativo, llegando a los usos abusivos del alcohol y drogas.
— ¿Cuál es el perfil del joven feliz español? Tiene bien amueblada la cabeza: cuenta con un proyecto de vida, un norte; su vida es algo más que llegar al fin de semana y divertirse y pasárselo bien. Es falso que la felicidad consista en pasárselo bien el fin de semana, beber sin límites y, si se tercia, tomar todo tipo de drogas. Es altruista: está preocupado por lo que pasa en su barrio, en el mundo. Tiene sentido crítico: ve en la tele algo más que ñoñerías. Actúa como persona civilizada: rechaza los planteamientos incívicos como no pagar el autobús, rayar un coche, romper una farola, o cualquier acto que tengan que ver con la violencia. Es un ser social: esa persona tiene un sentido cívico de la vida, ha salido de su ‘yo’.
— ¿Quién sostiene eso? “Estamos ante el principio socrático de la virtud, de la justicia, de la verdad unido al principio evangélico del amor. Y eso se ha demostrado que da la felicidad. Los libredisfrutardores, son menos felices, y los retraídos, aún menos”.
— ¿Chicos y chicas? “Las mujeres son las más contentas. De 15 a 24 años las chicas tienen una estructura más construida que los chicos, saben divertirse con red, congeniar mucho mejor que ellos el trabajo con la diversión, y la preocupación por el presente mirando al futuro; ellas tienen un cierto control sobre la vida que no tienen ellos”.
— ¿También en el trabajo? “Sucede que dentro de diez o quince años, ese joven que hoy pone todo el acento en la diversión, puede ponerlo en el éxito social y la chica no, porque ella va a seguir conservando el equilibrio entre el ocio y los estudios, algo que querrá mantener después entre su vida personal y su vida laboral y eso es un handicap para poder escalar a las mejores posiciones en una sociedad que busca por encima de todo la competitividad pura y dura y que el líder entregue su cabeza, su tiempo y su vida a la empresa”.
—Entonces, ¿jóvenes felices no tienen por qué ser adultos felices? “No. El caso más claro es el de las mujeres. Pero jóvenes que ahora no son muy felices, con un mayor grado de autocontrol, lo serían más”.
— ¿Y los retraídos? “Lo vencerán quienes tengan la tremenda suerte de encontrar una chavala que les quiera de verdad. Creo mucho en el noviazgo y pienso que éste puede cambiar muchas cosas”.
—El joven medio español, ¿es de izquierdas o de derechas? "Son más de izquierdas que de derechas. Es un fenómeno curioso y positivo porque indica cierta rebeldía. Los demócratas son más felices que los autoritarios". El crecimiento te enseña: "a menos edad, menos felicidad". (Abc, 28.10.06, S-6, pp. 8-9)
1 comentario:
Quiero un novio ya!!!
O en su defecto, una sociedad asexuada y robótica.
Quiero un novio pero ya!!!
Quiero a Harrison Ford.
Pero sólo si lleva, bien el sombrero de Indiana, bien la mirada de Deckard.
¿Ubi est?
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