08 julio 2008

¿Qué tal si montamos un nuevo modelo educativo?

Vamos ya por el cuarto plan de estudios, en un par de lustros. ¿Resultados? Aburrimiento ante “más de lo mismo”. ¡Podríamos lanzarnos a reformar la enseñanza de verdad! No creo en las normas muertas: creo en las personas vivas. Sobran modelos, y faltan compromisos y vivencias. Si queremos, podemos. Fiel a mi lema: “Imposibles, en el acto; milagros, tardamos un poco”.

¿No has reflexionado nunca sobre qué corregirías tú en las clases, si pudieses reformarlas? Yo sí lo he pensado. Adolezco de ser un incorregible soñador de imposibles, y estoy muy ufano de serlo. No creo en el realismo de los derrotistas: prefiero el idealismo de los comprometidos. Muramos con las botas puestas.

Tras darle vueltas a mi experiencia, creo que el verdadero cambio y transformación en nuestra enseñanza vendrían de lograr lo siguiente:

· Profesores más implicados en la formación de los estudiantes.

· Clases más enriquecidas con tutorías, seminarios, talleres, prácticas y trato fuera del aula.

· Conexión directa de la enseñanza con los problemas del mundo profesional y del mercado laboral.

· Burocracias orientadas al servicio personalizado e individual del alumno.

· Centros que atiendan a la formación según la perspectiva integral de la persona.

· Ofertar una cualificación completa para los estudiantes, también humana.

· Abrirles a la ciencia y a la civilización en un contacto ininterrumpido.

· Actualización constante de avances y puesta al día, con renovación incesante.

· Asumir responsablemente cada estudiante la configuración de su curriculum y de su aprendizaje.

· Calidad académica: buscar siempre no el mero cumplir, sino alcanzar la perfección y la excelencia.

· Equipos: desarrollar el trabajo grupal compartido, colectivo y participativo.

· Casos. Eliminar la memoria de datos, y potenciar la resolución de problemas prácticos.

· Avance personal constante de cada alumno. Enseñarles la búsqueda de la mejora continua.

· Nuevas Tecnologías: imponer el uso constante y el servicio mediante las TIC.

· Discípulo-maestro. Establecer de nuevo la relación de mentores y orientadores en los grupos académicos.

· Valores. Ofrecerles a los estudiantes muestras vivas y reales, con recursos y contextos.

· Potenciar que los estudiantes adquieran todas las competencias profesionales y sociales.

· Responsabilizarles e implicarles en la dimensión colectiva y ciudadana de la vida.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Si estuvieses pidiendo firmas para promover un nuevo sistema educativo con estas premisas te firmaría ahora mismo.

¡Hay que hacer que se oigan estas reivindicaciones!

Anónimo dijo...

Hola. En primer lugar, decirte que me gusta mucho tu forma de expresarte. Es muy difícil encontrar bitácoras tan correctamente escritas y con tan buen vocabulario.

Por otra parte, respecto al tema de la entrada, me gusta la idea de hacer un nuevo modelo educativo basado en lo que comentas, sin embrgo, tu propuesta está vacía de contenido, sólo das unas directrices, nada práctico que poder aplicar en el aula, en el Ministerio o en las CC.AA. Además, muchas de las cosas que propones ya están supuestamente logrados o intentados en el sistema actual, lo que pasa es que, los medios por los que se buscan no facilitan la consecución. Precisamente, porque tanto alumnos como profesores (sobre todo en centros públicos), buscan cumplir con su obligación sin llegar a profundizar y poco más, entre otras cosas por la falta de motivación y de posibilidades, no necesariamente económicas.

Anónimo dijo...

Menado: http://meneame.net/story/tal-si-montamos-nuevo-modelo-educativo

Anónimo dijo...

Para Nacho..
La "bitacóra correctamente escrita", está escrita por un profesional de los medios y la comunicación... además de docente en distintas universidades de España... (puedes ver su CV)
Faltaría más que no fuera así...
UN SALUDO PEDRO!! YOU ARE THE BEST!!
;)