Aprende algo que aquí nos falta. Fórmate y mejora, teniendo el mundo entero como referente. Lo que de verdad importa es tu capacidad de aprendizaje, tu rendimiento profesional, tu labor bien terminada. Un trabajo bien hecho es igual de satisfactorio en un laboratorio que en una banda de rock. Lo que en realidad importa eres tú y tu capacidad de trabajar y de producir.
Eso ocurre así en cualquier rincón del mundo. Y si aquí no sucede, porque el sistema está viciado, vete pensado en irte en busca de pastos más verdes. Piensa constantemente en la posibilidad de emigrar a donde, con el mismo esfuerzo invertido que aquí, puedas lograr mayores beneficios, que se traduzcan en cantidad y calidad de tiempo libre para tus demás intereses.
Soy de la opinión de que si aquí NO te contratan... ¿qué se te ha perdido en un secarral? EMIGRA donde te valoren. Es una lástima, pero es la realidad. Ánimo, chavales: el mundo no se acaba en nuestras fronteras. Os deseo toda la suerte del mundo.
En definitiva, gastamos el dinero tristemente en preparar a licenciados de elite, que luego se irán fuera a ganarse la vida, porque aquí no se sabe o no se quiere valorarlos. Los buenos se van y los mediocres se quedan, dejando un país vacío de cerebros.
1 comentario:
Es cierto que aquí tenemos poco, pero menos oportunidades tuvieron nuestros padres y nuestro abuelos. Creo que somos demasiado quejicas y somos la generación con mas recursos.
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