Más autonomía y mayor financiación, sobre todo privada. Esta es la solución para nuestras universida-des, según publica la Comisión Europea en la Comunicación sobre cómo modernizar las universidades europeas. Existe un excesivo control público y falta una financiación suficiente.Dentro de la Unión Europea contamos con 4.000 centros universitarios, con 17 millones de estudiantes superiores y con 1,5 millones de docentes y directivos, de los que 435.000 son investigadores. Pero todo este potencial se desaprovecha por la rigidez y la fragmentación del sistema universitario, que impide la cooperación coordinada internacional. Igualmente la financiación debe alcanzar al gasto a U.S.A. en actividades de enseñanza e investigación, invirtiendo 10.000 euros anuales por estudiante.
Debemos crear –según recomienda la U.E.- un sistema articulado con universidades de relieve mundial, una red de universidades nacionales y regionales, junto a “colleges” que proporcionen estudios técnicos más cortos: con un perfil diferenciado, más centrado en lo que destaca.
Básicamente recomienda estos nueve puntos:
- Romper las barreras de los países: universalizar con el “proceso de Bolonia” la estructura en tres niveles: primer ciclo, máster y doctorado. Favorecer la movilidad, duplicando al menos el número de alumnos que pasan un semestre como mínimo en el extranjero
- Garantizar autonomía real en las universidades para sus programas y prioridades, para seleccionar al personal docente e investigador, y para establecer su presupuesto y buscar fondos.
- Que las universidades tengan una más estrecha relación con el mundo de la empresa, para explotar su saber científico y tecnológico.
- Reforzar el empleo para los graduados, ajustando sus estudios de acuerdo a las necesidades del mercado laboral.
- Lograr Financiación privada (tasas académicas, empresas y donaciones) dedicando en un plazo de diez años un 2% del PIB a la enseñanza superior, teniendo presente que la gratuidad no implica necesariamente equidad social.
- Centrar menos su enseñanza en disciplinas específicas y más en campos de investigación (energías renovables, nano-tecnología), con un enfoque interdisciplinar (incluyendo humanidades, ciencias sociales y habilidades empresariales).
- Reforzar la comunicación de las universidades con la sociedad, favoreciendo el diálogo entre especialistas y ciudadanos (conferencias, días de puertas abiertas, foros de discusión...).
- Buscar la excelencia atrayendo a los mejores profesores e investigadores, reclutándolos mediante procedimientos transparentes, flexibles y abiertos, seleccionando campos particulares donde puede alcanzar la excelencia y concentrarse en ellos.
- Atraer a más estudiantes e investigadores del resto del mundo. Promover la calidad de la enseñanza. Acelerar los trámites para la entrada de los estudiantes e investigadores de fuera de la UE y lograr que los títulos europeos sean reconocidos en el resto del mundo.
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