Esta política vasca, nacida en Bilbao en 1948, ha arriesgado durante años su vida ante el terrorismo, siendo amenazada de muerte como miembro del PSE-EE [Partido Socialista de Euskadi-Euskadiko Eskerra, Euskal Sozialistak]. Fue concejala hasta 2007 en el municipio bizkaitarra de Getxo. Además, durante años, ha seguido siendo profesora de Sociología en la Universidad del País Vasco-Euskal Herriko Unibersitatea.
Dentro del PSE se enmarcaba dentro de las corrientes de políticos socialistas como Rosa Díez o Nicolás Redondo, por su rechazo a la negociación con ETA, por su defensa de una alianza antiterrorista con el Partido Popular y por sus críticas a la gestión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Ante el proceso de paz iniciado con los terroristas, declarado en 2006, ha mostrado su oposición a cualquier tipo de negociación con la banda etarra, a pesar del compromiso de su partido de no tratar temas políticos en sus conversaciones.
Tras abandonar su concejalía, fue presenta como nueva secretaria de Inmigración y Ciudadanía del gobierno valenciano del PP. Justificó su nuevo cargo señalando que su desacuerdo con lo que hace el Gobierno de Zapatero le ha llevado a situarse "por encima de las siglas", pedir el voto para el PP e incorporarse a uno de sus ejecutivos.
A ella le precedió la expulsión de al menos 18 militantes del PSOE -entre ellos la ex-Ministra Cristina Alberdi- y la disolución del Comité Local del PSE de Sestao, todos ellos por apoyar las tesis moderadas de Nicolás Redondo Terreros.
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