Nueva York nunca defrauda. Te encuentras con iniciativas ciudadanas por todas partes. Los estudiantes de la Universidad de Columbia no son una excepción. Saben hacerse notar y tienen sus peculiaridades. Su famosa "C" de Columbia se encuentra pintada magníficamente en plena pared rocosa, justo enfrente de la universidad, al lado opuesto de su orilla, en el río Hudson. Ocupa más de treinta metros, bien pintados en la roca, con un tono azul claro fuerte, rodeado de un borde blanco, que es como oficialmente se presenta el símbolo de esa universidad.
Desde 1952 se mantiene allí expuesta y conservada cuidadosamente por los alumnos de la Universidad de Columbia, bien orgullosos de su institución. Justo delante de la pintura, en la orilla izquierda que da a la isla de Manhattam, queda el complejo deportivo Baker Field, perteneciente a esa universidad. La idea de pintar la "C" partió de un grupo de estudiantes que pidió permiso para hacerlo a las autoridades de Nueva York en la vía fluvial. El trabajo lo hicieron concienzudamente, descolgándose para ello con cuerdas por el acantilado.
Lo más divertido e impresionante es ver como saltan desde allí al agua los universitarios. Lo hacen tan contentos, tanto chicos como chicas, desde esa altura impresionante de la roca, hasta el cauce del río. Me está entrando bastante envidia, cada vez que lo pienso… Quizá me anime a saltar yo también desde allí un día de estos. La verdad es que he quedado ya con otro profe para hacerlo, este domingo. Esperemos que no se me arrepienta y que pueda hacer el plan. Ya te lo contaré. Va a estar divertido. La pena es que no pueda sacarme fotos para que lo veas.
Desde 1952 se mantiene allí expuesta y conservada cuidadosamente por los alumnos de la Universidad de Columbia, bien orgullosos de su institución. Justo delante de la pintura, en la orilla izquierda que da a la isla de Manhattam, queda el complejo deportivo Baker Field, perteneciente a esa universidad. La idea de pintar la "C" partió de un grupo de estudiantes que pidió permiso para hacerlo a las autoridades de Nueva York en la vía fluvial. El trabajo lo hicieron concienzudamente, descolgándose para ello con cuerdas por el acantilado.
Lo más divertido e impresionante es ver como saltan desde allí al agua los universitarios. Lo hacen tan contentos, tanto chicos como chicas, desde esa altura impresionante de la roca, hasta el cauce del río. Me está entrando bastante envidia, cada vez que lo pienso… Quizá me anime a saltar yo también desde allí un día de estos. La verdad es que he quedado ya con otro profe para hacerlo, este domingo. Esperemos que no se me arrepienta y que pueda hacer el plan. Ya te lo contaré. Va a estar divertido. La pena es que no pueda sacarme fotos para que lo veas.
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